La Modorra
Entre 1510 y 1514 la relación entre conquistadores, indigenas en condición de esclavitud y reservas de comida favoreció el asentamiento, que llegó a ser, con más de 3500 habitantes, la colonia más poblada de todas las Indias occidentales.
Sin embargo, la llegada de la gran flota de Pedrarias a Urabá trastocó los equilibrios entre población y territorio. Pocos meses después de que los recién llegados se asentaran en Santa María de la Antigua del Darién, una devastadora mezcla de hambruna y modorra mató a casi la mitad de la población hispánica de la colonia. En palabras de Bartolomé de las Casas «esta fue siempre una de las principales causas que han asolado estas Indias, como parecerá, dejar venir a ellas demasiada gente de España». Es uno de los pocos casos en donde la enfermedad hizo estragos exclusivamente entre la población de origen europea.
No sabemos a ciencia cierta que es la modorra, una enfermedad relacionada con la mala alimentación. Más que la falta de comida, la epidemia golpeó a los españoles por su incapacidad de acostumbrarse culturalmente a los alimentos disponibles. El elemento central de la dieta ibérica era el pan. El pan además se vuelve el cuerpo de Cristo en el ritual católico de la eucaristía. Desde esa perspectiva, sin pan no hay comida: ni material, ni espiritual. Sin embargo con el aumento de la población europea, las mujeres indígenas no alcanzaban a dar abasto en el proceso de panificación del maíz y de la yuca. La escasez de pan, junto con la coyuntural pérdida de una cosecha y el acaparamiento indebido de las raciones por parte de unos pocos, llevó la colonia a la crisis. La modorra que azotó a los nuevos y a los viejos pobladores no sería sino el preámbulo al trágico final de la colonia diez años más tarde.
La Modorra

Probetas

Hospital de Santiago
A finales de 1515 se había concluido la construcción del Hospital de Santa María de la Antigua del Darién, una edificación que consistía en varias casas y una botica. En su capilla descansaba la imagen del apóstol Santiago. Este hospital estaba equipado con cincuenta camas y contaba con varios elementos que habían sido traídos en la armada de Pedrarias para atender a los enfermos, así como con objetos indígenas como vasijas y jarras, los cuales fueron traidos por Balboa y sus hombres durante su segundo viaje al Mar del Sur. Los enfermos eran asistidos por esclavos indígenas bajo la supervisión del mayordomo del hospital, quien solía ser un clérigo.
En el trabajo arqueológico realizado, se ha identificado la ubicación del hospital gracias al hallazgo de baldosas españolas utilizadas para decorar las paredes, probetas de vidrio y ladrillos.