La conquista española en Abya Yala (América) trajo desintegración, trabajo forzado, despojo y esclavitud para los pueblos originarios, llevándolas al borde de la extinción. Las poblaciones de habla Cueva se enfrentaron a los conquistadores en defensa de su territorio y comunidades. En Santa María de la Antigua, el cacique Cemaco y el cacique de Abybaibe trataron de atacar la ciudad española en varias ocasiones en un intento por recuperar su territorio y liberar a sus familias; los caciques de Bea, Guaturo y Corobarí, los más vecinos a Santa María de la Antigua, se rebelaron contra sus encomenderos tras los abusos cometidos por estos; y Santa María de la Antigua fue destruida a manos de indígenas en un acto de resistencia. La lucha por la defensa sus derechos, autonomía, soberanía y autodeterminación continúa hoy; a pesar de estar protegida por la Constitución de 1991 es una una realidad inacabada.