Santa María de la Antigua del Darién fue la primera ciudad fundada por los españoles en tierras continentales, marcando un punto de partida en el proceso de colonización que transformaría profundamente el territorio que hoy conocemos como América.
Este vasto continente ha sido testigo de múltiples nombres en las lenguas indígenas, muchos de los cuales se han desvanecido en el tiempo. Entre esos nombres, uno ha sido reconocido por buena parte de las comunidades nativas: Abya Yala, que en la lengua Guna se traduce como «Continente de Sangre».
A pesar de su breve existencia, entre los años 1510 y 1524, Santa María de la Antigua fue un punto de inflexión crucial en la historia. La ciudad colonial fue fundada en un lugar que en la actualidad es considerado inhóspito: el Darién. Aquí, se gestaron los modelos de conquista que alterarían drásticamente el destino del continente en adelante.
La ciudad de Santa María de la Antigua sucumbió y fue reducida a cenizas a manos de los nativos que se unieron para expulsar a los conquistadores.
Los pueblos originarios mantuvieron fuertes procesos de resistencia durante largo tiempo, algunos de los cuales persisten hasta nuestros días, con el firme propósito de preservar sus tradiciones y vivir en libertad, haciendo frente a la violencia colonial, estructural e histórica.
Asimismo, un gran número de personas secuestradas del continente africano y sometidas a la esclavitud se alzaron en nombre de la libertad. En el Darién, durante el siglo XVI, tras la caída de Santa María de la Antigua, se conformaron reinos africanos, destacando el famoso Reino de Bayano.
El Darién colombiano es habitado actualmente por una diversidad de poblaciones. La antigua comunidad Guna de Arquía, último vestigio de la Nación Guna en la región, comparte territorio con comunidades Emberá Dobida y Emberá Eyabida. Por otro lado, las comunidades afrodescendientes se asientan en la costa, las ciénagas y a lo largo del Bajo Atrato.
A los primeros colonos, provenientes de finales del siglo XIX, se han sumado campesinos de Córdoba, el bajo Chocó y Antioquia.
Estos movimientos y la llegada de nuevas poblaciones han dado lugar a nuevas relaciones, tanto entre las personas como con el territorio y sus habitantes, transformando constantemente el paisaje.
El sitio arqueológico de Santa María de la Antigua del Darién nos permite reflexionar sobre la conquista europea del continente americano y sus profundas consecuencias, resonando con múltiples voces y desde diferentes formas de conocimiento y experiencia.